Ayer me desperté triste. La victoria electoral de la derecha y la extrema derecha me quitaba el sueño.
Pensaba en una frase de Albert Camus sobre la guerra civil española:
-«Se puede tener la razón y perder la guerra».
No soy analista político ni profeta… por ahora. Solo un periodista jubilado. Si embargo, nada más levantarme, tuve un presentimiento. Así se lo conté a Ana Westley, mi esposa (awestley.com):
-«Si yo fuera Pedro Sánchez, disolvería las Cortes y convocaría elecciones generales inmediatamente».
Al cabo de un rato, el presidente me dio la razón. Por eso, no me sorprendió. Me recordó la audacia de Felipe Gonzalez cuando renunció al marxismo… y los socialistas, despavoridos, se unieron rápidamente a él como una piña. Y ganó las elecciones muchas veces. También me recordó una frase que yo atribuí erróneamente a Cicerón (un error, pues es de Virgilio, copiada de un griego):
-«La fortuna favorece a los audaces»
¡Olé! Pedro Sánchez puede ganar, con Nadia Calviño de número 2 y sin comunistas, independentistas ni populistas en sus listas. Solo en coalición, si hace falta.
¡Ánimo, presidente! Ya tienes mi voto.