Hace un cuarto de siglo nació 20 minutos, «el primer diario que no se vende», y, con ello, me quité la espina de El Sol, mi gran fracaso profesional. ¡Feliz cumpleaños, colegas! He repasado el «Especial 25 años» que mis sucesores han dedicado hoy al cumpleaños de la aventura periodística más hermosa de mi vida. Páginas cargadas de emoción y buen periodismo. Nuestro lema siempre fue: «Pasarlo bien, ganar dinero y con integridad». Gracias por mantener vivo el espíritu fundacional de 20 minutos… y mejorar el producto. Enhorabuena y ¡larga vida a 20minutos!

En mis memorias, («La prensa libre no fue un regalo», Marcial Pons) dedico un capítulo a la fundación, crecimiento, crisis y resurrección de 20 minutos. Los tres competidores que surgieron tras nuestro nacimiento (Metro, ADN y Qué) no se adaptaron a la gran crisis del 2008 y murieron. De los cuatro gratuitos solo sobrevivió, no sin dolor, 20 minutos. Y ahí está, navegando felizmente con el grupo Henneo que lo compró a Schibsted, nuestro socio noruego.


















